La administración de Alianza Lima tenía “mayores expectativas” con Roberto Mosquera. Por ahora, el respaldo no basta.

La administración de Alianza Lima tenía “mayores expectativas” con Roberto Mosquera. Por ahora, el respaldo no basta.

Alianza Lima "no está contento" con Roberto Mosquera

No, no lo están. Y por una razón, que ha dejado de ser un rumor, para convertirse en un llamado de atención oficial para Roberto Mosquera. En Alianza Lima tenían “mayores expectativas” con los resultados que podía conseguir Mosquera, y así de claro lo ha dicho ante la prensa el administrador Christian Bustos, la misma autoridad que luego se animó a respaldar el trabajo del resistido DT.

Ojo. Cuando un dirigente sale ante los medios a respaldar la continuidad de su técnico, el hecho solo tiene un significado: lo está “cocinando a fuego lento”. O sino pregúntenle a Gustavo Roverano.


Era martes 21 de julio del 2015. Guillermo Sanguinetti fue destituido y Gustavo Zevallos, gerente deportivo de Alianza Lima, presentaba a Gustavo Roverano como nuevo técnico del conjunto blanquiazul. Pero cuidado con un detalle: Roverano firmó luego de haber ganado cinco partidos consecutivos, pese a ser el estratega oficial de la reserva del club. Y para nadie era un secreto a voces que Roverano no era la primera opción ni para Zevallos, ni para Christian Bustos. Sin embargo, en Alianza cayeron en una lógica: ¿para qué arriesgarnos a gastar en contratar a otro técnico, si nos está yendo bien?

Gustavo Roverano recuperó a aquellos jugadores que se sentían relegados por Sanguinetti, le devolvió competitividad e identificación de juego a Alianza Lima. Además, el grupo se fortaleció espiritualmente con la presencia que otorgaba anímicamente el ex golero íntimo.


“ Gustavo tiene contrato hasta fin de año con Alianza Lima. Los detalles de su contrato no las revelaremos por obvias razones. Estamos a muerte con él. Estamos satisfechos con el grupo y con su trabajo”, me dijo el propio Zevallos en una entrevista que le hice en aquella época.

Bastó con que Roverano pierda la opción para pelear el Torneo Apertura y que la irregularidad en el Torneo Clausura lo deje sin chances en octubre para que Alianza Lima confirme lo que nos dijo una fuente cercana a la administración temporal –y con poder de decisión dentro del club – en su momento: la permanencia de Gustavo “está siendo evaluada”.


Su destitución, no fue una novedad para Roverano, pero sí mostró su incomodidad en una entrevista que le realicé previo a la decisión de la administración: “Incomoda que se hable de la llegada de un técnico Roberto Mosquera. Yo me siento tranquilo por lo logrado e intento no pensar en lo que se dice y se comenta”.

¿MOSQUERA SEGUIRÁ EN EL CARGO?

Volvamos a julio del 2016. Cristian Bustos no está contento con los resultados que ha conseguido hasta ahora Roberto Mosquera y sus ánimos lo llevaron a cometer una infidencia que solo debe ser materia de discusión en casa: “*Mosquera* está trabajando como cualquier jugador del club. Es evaluado y estamos observando su trabajo”.

¿Se equivocó? Sí ¿Qué fomentan estas declaraciones? Un ambiente más tenso entre hinchas – técnico y directiva- y técnico. Porque “no tiene sentido que los directivos contraten a un entrenador y no lo apoyen en su proceso. Debe haber un respaldo siempre”, aseveró Gustavo en la entrevista. Pero del sincero, no como el que le ofrecieron a Roverano.